miércoles, 29 de agosto de 2012

La llamada borracha


Inicio esta entrada aclarando que la borracha es la llamada no yo, jajaja #soyincapaz #nomecreanpuej # siescierto #buajajaja
 
Bueno, desde hace varios días he estado recibiendo llamadas de números que no tengo registrados en mi celular, los que me conocen; saben que no contesto llamadas de números desconocidos, ¿Por qué? Porque mi mamá me dijo que no hablara con extraños jajaja, pero en serio no contesto porque generalmente son para ofrecerte tarjetas, seguros o para hacerte alguna encuesta, además tuve una mala experiencia con un acosador que casi me hace cambiar el número que tengo desde hace 13 años, pero en lugar de cambiar mi número, tomé la decisión de no contestar, si quieren contactarme los que no están en mi directorio, que me manden un sms y los agrego a mis contactos, buajaja me las tiro de la importante…

Pero volviendo al tema, el viernes recibí una llamada tipo 11 p.m. de la noche, ya estaba yo en mis pijamas viendo una peli y disfrutando el delicioso clima gracias a que llovían sapos y culebras afuera; la persona que me llamaba insistió 15 minutos después y una tercera y última vez alrededor de las 1:00 a.m.; ignoré las tres llamadas, espero no haya sido nada urgente, pero me puse a pensar que a esas horas sólo pudo ser una llamada de naturaleza borracha; seguro eran algunos amigos que estaban en una fiesta o alguien que por borracho queriendo llamar a su novi@, amiga, amante o esposa se equivocó de número.
 
Y aunque la llamada por último no me dejaba dormir, me dio mucha risa porque recordé esas llamadas cortapulsos, en las que te acordás del susodicho después de unas buenas rondas de tragos y que vos o a tu amiga de al lado se le ocurre llamar, esas llamadas en las que se te viene todo el amor o todo el despecho, donde unas piden que vuelvan, otras que aseguran que es el amor de su vida, o que le reclaman por millonésima vez que es imbécil, que la vida no vale nada; no voy a decir que no me he visto tentada a hacer esas llamadas, siiiiiii me ha pasado, es más las he hecho.
 
Recuerdo una vez que mis amigas me secuestraron el celular para evitar que llamara y yo muy campante me robé el celular de otra y fui al baño a realizar mi propósito, gracias a Dios y a los tragos nunca me acordé de todos los números del sujeto y marqué random como 5 combinaciones diferentes, seguramente despertando a media humanidad, pero nunca di con el tipo.
 
Ahora me río y les agradezco a mis amigas, porque casi tan peligroso como “tomar y manejar” es “tomar y llamar” peor aún si andás de cavanga, donde uno dice una sarta de sandeces dignas de un bobel, si no me equivoqué de letra, no es nobel, es un bobel por boba.
 
Ya les conté así de refilón de mi llamada borracha más memorable, pero he oído historias de terror de otras amigas que dicen que les ha contestado la nueva novia, la mamá o que se han equivocado de número y el del otro lado se lanza todo el cuento muerto de risa, pero esas son las cosas que recuerda una también con una sonrisa.
 
Y para cerrar sólo me queda dar las gracias a:

Las amigas que te secuestran el celular: una amiga de verdad no te deja tomar y llamar.

El caller id: para descartar las llamadas indeseables de otros borrachos que no son vos.
 
Los mensajes de texto: porque cuando estás sobrio sabés que quieren de vos y cuando estás tomado no los podés mandar nunca y te das por vencido.
 
Las lagunas mentales: porque si no te acordás es porque tu cerebro no quiere que te acordés que seguramente hiciste el ridículo.

Y gracias a ustedes por leer mis locuras :P


Foto: Getty Images