miércoles, 11 de julio de 2012

La sucia sociedad masculina


Entre mi papa, Disney y Hollywood me jodieron la vida. Estoy segura que a un buen ramo de mujeres les pasó lo mismo. Ellos, nuestros padres en conjunto con Walt Disney y la famosa meca del cine, nos han fijado en la cabeza un prototipo de hombre ejemplar, perfecto, un príncipe azul en su corcel blanco.
 
Recapitulemos un poco ¿Por qué mi papa? Mi papa está lejos de ser un hombre perfecto, pero yo siempre lo vi con ojos de enamorada, altísimo, siempre oloroso y bien peinado, con sus camisas manga larga y sus pantalones de tela perfectos y rebien planchados, (Obviamente siempre tuvo que ver mi mama en su presentación); él, mi papa, aunque llegara a media noche siempre me daba un beso de buenas noches como el príncipe a la bella durmiente, para él siempre fui su muñeca o su niña, como aún me sigue diciendo a mis 31 años, 4 meses y 21 días.
 
Disney y Hollywood no contribuyeron mucho con esta percepción, sino vean a la bestia peluda de la Bella y la Bestia (JAJAJA no puedo dejar de decir bestia peluda sin parar de reírme)... Pero en serio...¡Andaba bien peinado! y si hablamos de los personajes de carne y hueso siempre se mostraron impecables, nunca se les mueve un pelo, la tormenta podía ser perfecta, pero su cabello y sus uñas eran más perfectos todavía.
 
Sin embargo, he de confesar que en mis años de adolescencia tuve mi etapa en la que los hombres arreglados me parecían plásticos y falsos; por eso pasé enamorada buena parte de esos años de Kurt Cobain (Aaaaaahhhh suspiro) no es mi culpa que Nirvana estuviera en su apogeo y que Kurt y su franela de lana se quedaran a vivir en mi cerebro, quitándole espacio a las clases de Química y de Física, pero esa es una licencia que aún me doy, porque hay que admitir que el hombre era maravilloso.
 
Pero regresando al 2012 ¿Ahora que se encuentra una? A pesar de la onda metrosexual, a una le salen los imbañables, los enemigos del desodorante y el cepillo, los maes que en su vida han puesto una plancha sobre la camisa que andan colgada. Me disculpan señores pero el baño y el aseo personal no son un lujo, ni una locura más que las mujeres nos inventamos, es una necesidad básica como tomar agua o respirar; no tienen que andar con ropas de marca o zapatos de diseñador, créanme que una aprecia el simple hecho que anden limpios, presentables y que por el amor de Dios ¡Huelan bien!
 
Una sabe que no tienen un team que ande detrás de ustedes haciéndoles el pelo, las uñas y maquillándoles las espinillas, sólo un poco de cuidado se agradece, porque si no, podés ser un tipo grandioso, buena persona, mejor que cualquier personaje de Disney pero con el que nadie quiere hablar. Así que hombres ¡báñense! o no nos quedará de otra más que repartir jabón y desodorante en la calle.
 
Feliz miércoles :)

Foto: Getty Images

2 comentarios:

CLAVEDEDO dijo...

La partiste loca. Muy nice.

SolterayFelizAlos30s dijo...

Gracias Sucha! Un beso!!